Gestiónde tesorería

Nos hemos destacado a lo largo de nuestra historia por tener una sólida posición financiera, lo que ha sido resultado de una búsqueda permanente por diversificar nuestras fuentes de financiamiento, además de un crecimiento sostenido y balanceado, que ha ido de la mano de una gestión eficiente de los riesgos.

Lo anterior rige el actuar de la Tesorería de Tanner, la cual está a cargo del financiamiento de las operaciones, inversiones, y gestión del balance, velando por mantener una liquidez tal que la Compañía pueda hacer frente a situaciones de estrechez financiera que tengan sus orígenes en fluctuaciones de los mercados locales e internacionales. Asimismo, se asegura de cumplir los principios de calce que guían la gestión de activos y pasivos de la Compañía y los límites de exposición en distintas monedas e instrumentos financieros establecidos por el Directorio. A la vez, realiza de manera proactiva y eficiente la estructuración de obligaciones, en base a análisis de mercado, vencimientos, estructura del balance y diversificación del fondeo, de manera que haga total sentido con el negocio de Tanner y ser competitivas en el mercado.

En cuanto a la gestión de inversiones, la Tesorería está constantemente monitoreando el mercado para detectar las mejores alternativas de inversión, que nos permitan obtener el máximo retorno ajustado por riesgo de nuestros recursos, siempre manteniendo un nivel de excedentes adecuado para cubrir las necesidades de caja de corto plazo. A objeto de lograr lo anterior, realizamos inversiones en fondos mutuos, depósitos a plazos, pactos de retrocompra y bonos.

Dada la naturaleza de la estrategia de financiamiento de la Compañía, desde el punto de vista del pasivo, enfrentamos exposiciones a diferentes monedas, las que son cubiertas, de manera de minimizar la exposición global del balance frente a fluctuaciones del mercado, tanto en tasas de interés, como valor de las divisas. Del mismo modo, las exposiciones a inflación son gestionadas de manera bastante conservadora, buscando mantener un saludable balance en términos de exposición a UF.

En términos de gestión de liquidez, contamos con un descalce conservador en duración de activos y pasivos, donde en promedio los pasivos financieros, es decir, excluyendo el patrimonio, tienen una duración 0,56 años superior a la promedio del activo, llegando al cierre de 2017, a 1,61 años por el lado del pasivo y 1,05 en el activo, lo cual nos otorga un buffer financiero ante movimientos en la tasa de interés. Además, se encuentra constantemente bajo análisis a objeto de poder aprovechar las oportunidades que nos brinda el mercado en períodos de alzas y bajas de tasas.

Al 31 de diciembre de 2017, nuestra deuda financiera llega a $ 815.989 millones, la cual se compone de $ 63.336 millones de efectos de comercio, $ 222.359 millones de créditos con instituciones nacionales e internacionales, $ 496.783 millones de bonos y $ 33.510 millones de otros, compuestos en 87% por pactos y 13% en obligaciones por forwards. En tanto, la caja y equivalente al efectivo alcanza $ 84.636 millones, con lo que se obtiene una deuda financiera neta de $ 815.989 millones.

2017 fue un año activo en emisión de deuda para nosotros y aprovechando las oportunidades del mercado local colocamos un bono a 4 años por 1,5 millones de Unidades de Fomento y un spread de 186 puntos, disminuyendo 72 puntos con respecto a la emisión previa de 2016, además de inscribir una línea de efectos de comercio en dólares por US$ 80 millones, lo que nos transforma en los únicos emisores activos de este tipo de instrumentos. Adicionalmente, por segundo año consecutivo emitimos un bono en el mercado suizo, a 3 años y por CHF 100 millones (~US$ 100 mm), logrando reducir el spread en casi 100 puntos para llegar a 178 puntos base.

Con todo lo anterior, terminamos 2017 con 7 bonos vigentes en el mercado local y tres en el mercado internacional, uno en Estados Unidos (el cual vence en marzo de 2018) y dos en Suiza (con vencimiento en 2019 y 2020 respectivamente); junto con líneas pactadas con bancos chilenos y extranjeros, además de créditos de largo plazo con instituciones reconocidas a nivel internacional.

(1) Activos incluyen coberturas. (2) Pasivos incluyen patrimonio.